El bitcoin cae por debajo de los 100 000 dólares mientras el indicador alcista alcanza el cero
Bitcoin cae a mínimos de 99 010 $ mientras Bull Score toca cero por primera vez desde enero 2022. Analistas debaten si es corrección alcista o transición a mercado bajista.
Bitcoin ha atravesado una de sus semanas más críticas en 2025. La criptomoneda más importante del mercado cayó por debajo de la barrera psicológica de los 100 000 dólares el pasado miércoles 4 de noviembre por primera vez desde junio, marcando un nivel mínimo de 99 010 dólares durante la sesión. Esta caída coincidió con un acontecimiento técnico alarmante: el Bull Score de Bitcoin, un indicador compuesto de salud del mercado, alcanzó cero por primera vez desde enero de 2022.[1][2][3]
El contexto de la caída
La corrección de Bitcoin viene tras un octubre volátil que mostró a la criptomoneda alcanzando nuevos máximos históricos cercanos a los 126 186 dólares el 6 de octubre, solo para caer aproximadamente un 20% en las semanas siguientes. Según datos de análisis en cadena, este movimiento no es simplemente resultado de una volatilidad técnica, sino de transformaciones estructurales en el mercado.[4]
La caída ha sido impulsada por múltiples factores convergentes. En primer lugar, la Reserva Federal comunicó una postura más restrictiva de lo esperado, cuando el presidente Jerome Powell advirtió que un nuevo recorte de tasas en diciembre “está lejos de ser una conclusión asegurada”. Esto redujo las expectativas del mercado de un recorte de tipos en diciembre del 96% a menos del 70%, alterando significativamente la aversión al riesgo.[3]
En paralelo, los grandes tenedores de Bitcoin —las llamadas “ballenas”— han vendido aproximadamente 45 000 millones de dólares en el último mes, lo que ha ejercido presión constante sobre los precios. Además, liquidaciones por valor de más de 1 270 millones de dólares en posiciones apalancadas se han sucedido en tan solo los primeros días de noviembre.[5][1]
El Bull Score alcanza el cero: ¿Qué significa realmente?
El Bull Score es una métrica compuesta desarrollada por CryptoQuant que evalúa la fortaleza alcista del mercado de Bitcoin integrando diez indicadores diferentes en cadena y de mercado. Estos indicadores se agrupan en cuatro categorías: actividad de red, volumen de transacciones, rentabilidad de inversores y liquidez disponible.[2]
La escala del Bull Score va de 0 a 100, donde:
- Valores por encima de 60: indican un entorno alcista fuerte
- Valores entre 40 y 60: señalan condiciones neutrales
- Valores por debajo de 40: reflejan un sentimiento bajista[2]
Que el indicador haya caído precisamente a cero representa el nivel más bajo registrado desde el mercado bajista de 2022. Los componentes más débiles dentro del Bull Score son el MVRV (Market Value to Realized Value) y la liquidez de stablecoins, dos métricas que reflejan una menor rentabilidad de los inversores y una disminución en la participación de nuevos compradores.[6][2]
Análisis de la liquidez y el comportamiento institucional
A pesar de que Bitcoin mantiene un precio históricamente alto sobre los seis dígitos, el enfriamiento en los flujos de capital es evidente. Las entradas a través de ETF de Bitcoin spot han desacelerado significativamente, lo que sugiere una falta de nueva demanda institucional. Este factor es particularmente importante porque fue precisamente el crecimiento de estos ETF lo que sustentó gran parte del rally de Bitcoin durante 2024 y principios de 2025.[7][6]
La métrica MVRV ratio actualmente refleja que los inversores están obteniendo menos ganancias no realizadas o incluso enfrentando pérdidas, una condición que históricamente ha precedido fases de acumulación o puntos de inflexión importantes en el ciclo. Sin embargo, la ausencia de nueva liquidez institucional plantea un interrogante sobre si esta será una oportunidad de compra o el inicio de una corrección más profunda.[2]
¿Corrección saludable o inicio de un mercado bajista?
Las perspectivas de analistas se encuentran divididas. Algunos ven esta caída como una corrección saludable dentro de una tendencia alcista más amplia. Geoffrey Kendrick, jefe global de investigación de activos digitales de Standard Chartered, ha indicado que aunque una caída por debajo de los 100 000 dólares es “inevitable”, la considera “de corta duración” y un “reinicio de mitad de ciclo” impulsado por la liquidez más que por un cambio fundamental de ciclo.[8]
Sin embargo, otros analistas advierten que si el Bull Score permanece en estos niveles tan bajos durante un período prolongado, podría indicar un cambio estructural más profundo. El hecho de que indicadores clave como el histograma MACD muestren picos menores en el gráfico mensual, sugiriendo una desaceleración en el impulso alcista, añade validez a estas preocupaciones.[9]
Niveles técnicos críticos a vigilar
Bitcoin actualmente se sitúa alrededor de los 102 200 dólares, pero enfrenta niveles técnicos cruciales. La media móvil de 365 días en torno a los 102 000 dólares ha actuado como un nivel de soporte definitivo durante todo este ciclo alcista. Si se rompe este nivel, los analistas proyectan una corrección más profunda hacia la media móvil exponencial de 100 semanas alrededor de los 85 213 dólares.[4]
Por el contrario, si Bitcoin logra romper la resistencia en torno a los 106 435 dólares, podría extender su recuperación hacia niveles más altos. Históricamente, noviembre ha sido el segundo mes más fuerte para Bitcoin, con un rendimiento promedio del 46%, lo que ofrece un rayo de esperanza para los alcistas.[10][4]
Perspectivas para el resto de 2025
A pesar de la volatilidad actual, muchos analistas mantienen proyecciones alcistas para finales de 2025. Algunos analistas proyectan objetivos de 200 000 dólares para fin de año, mientras que mercados predictivos como Polymarket apuntan a que el precio estará entre los 129 000 y 144 000 dólares a finales de diciembre.[11][8]
La pregunta crítica que ahora enfrenta el mercado es si Bitcoin logrará recuperar su impulso institucional o si el Bull Score permanecerá deprimido durante semanas, confirmando un cambio de ciclo más profundo. Los próximos movimientos en los flujos de ETF, el comportamiento de los soportes técnicos clave y el tono de futuras comunicaciones de bancos centrales serán determinantes para definir el rumbo de la criptomoneda en los últimos meses del año.